ALBERTO CERRITOS

Pintor, Escultor, Muralista, Artista Digital

Alberto Cerritos: La Tradicion de Carnaval


Raro es el apego a la tradición y la búsqueda de independencia encontrada en armonía y balance. Esta síntesis es sín embargo visible en la obra de Alberto Cerritos. Su firma es una pictografía: mitad flor, mitad serpiente. Pero luego podría ser un pájaro flor, quizás una alusión al pajaro mítico y sagrado de Centro América, el quetzal. Si la deuda a los motivos mayas llega a ser más sutil en las pinturas, producidas desde su arribo a Canadá en 1989, la monumentalidad de su trabajo y su carnavalesco sentido del color

está profundamente enraizada en la tradición y dignidad de los artistas de Mesoamérica.


Nacido y educado en El Salvador, Alberto Cerritos recibió su entrenamiento en pintura y escultura, en la Escuela Nacional de Bellas Artes y en la Academia de Escultura Uquxkah en San Salvador. En verdad, es allí en El Salvador donde algunas de sus esculturas tempranas encargadas entre 1970-1980 se pueden encontrar. Sus monumentos en roca volcánica y granito que miden varios metros de altura celebran la naturaleza, la familia y la maternidad mientras otras esculturas en El Salvador ilustran alegorías al mar. Cerritos ha enseñado también escultura y dibujo en El Salvador y en Mexico entre 1975-1988. Algunas de sus exhibiciones individuales entre 1973 y el presente en San Salvador, Toronto, Vancouver, Chicago y en Mexico son un tributo al vigor de su talento, su productividad y su capacidad de renovarse. Además la vida de Cerritos es un compromiso al arte, la continua búsqueda de la relación entre el artista, la naturaleza y la humanidad ha impulsado su participación en proyectos colectivos y en intercambios internacionales en Canadá, Africa, California, Mexico y Guatemala. La vida es arte para Alberto Cerritos y asímismo el arte llega a ser testigo de la vida. Gozo y vitalidad dominan esta fusión particular y tambien la tradición latino americana del carnaval prevalece en esta exhibición.


La visión del arte y del rol de artista de Alberto Cerritos se basa mas en instinto, sentimiento y un profundo sentido de historicidad que en especulaciones cerebrales y en la búsqueda abstracta de conceptos pictóricos formales. Aun así en este momento de su carrera Cerritos normalmente desarrolla sus grandes pinturas en tres etapas. Primero es la inspiración o concepción despues es la exploración de la inspiración a través de una multitud de pequeños dibujos y bocetos a color. La etapa final es la aplicación de pintura sobre las grandes telas. El resultado es una explosión de figuras, volúmenes y color. Lo que es muy característico de estas grandes telas es la delicada segmentación modernista y reconstrucción de las formas, volúmenes y colores. La complejidad de este balance es mejor vista en una comparación entre las imágenes de sus cuadernos de dibujos y bocetos a color con aquellos de las grandes telas.


Sus pequeños dibujos y bocetos a color detallan el análisis de líneas, formas y su yuxtaposición de colores. Aquí también los recursos de la pintura: transparencia, claro-oscuro, profundidad y textura son exploradas. Las grandes telas de forma mural exhiben el completo rigor de la técnica de Alberto Cerritos. Algunas de estas telas son pintadas como frescos con imprimatura. Usando gesso húmedo el superpone el óleo y el acrilico, resultando un impasto translúcido.


Sería muy difícil no reconocer en trabajos como TOTEM y FABULA ecos de pintores y movimientos viejos y nuevos. Su conomiento y respeto por el pasado, sín embargo, brinda inteligencia e independencia a su inspiración. Allí hay afinidades obvias con los pintores del Renacimiento como Masaccio y Botticelli: uno muy conocido por su masiva plasticidad de las figuras y la arquitectura en sombras, el otro por el visionario liricismo a la vez gozoso y lánguido de figuras y paisajes. Ciertamente Alberto Cerritos ha sido influenciado por los muralistas de Latino America, pero a diferencia de Diego Rivera, Orozco o Siqueiros su plástica no es nacionalista ni social. Sus murales celebran el océano, la ciudad (Vancouver), el jaguar. Tolteca, Olmeca, motivos Mayas son visibles en sus casi explosiones surreales. En CYBERESPACIO y JAGUAR1 la serpiente portadora del conocimiento y la fecundidad juntan el hombro -metafóricamente- con instrumentos musicales, pájaros, máscaras, figuras humanas ó caracteres de la Commedia dell'Arte. Movimiento y armonía son producidos en explosiones de gozo, ritmo y humor.


Entre más miramos a sus telas, más descubrimos. Obras como LEFT WINDOW también traen a la mente el expresionismo de Jackson Pollock o de Alfred Pallan, pero la afiliación de Alberto Cerritos con el automatismo o el surrealismo no parecen llegar de un rechazo voluntario de las normas de composición y lógica y más de una imaginación volando libre en su búsqueda del ser como el producto de un pasado muy complejo y un presente siempre cambiante.


Los trabajos completados desde el arribo de Cerritos a la Columbia Británica reflejan un sentido agudo de la luz. En algunas de sus obras hay un decrecimiento del brillo en los colores que da más profundidad a las sombras. HASTINGS NEON es embrujador, fascinante y ambiguo. Las sombras son llenadas con ojos a la vez amenazadores y prometedores, igualmente ambiguo es TOTEM. Podría ser que el rojo y el blanco de la figura arriba sea una referencia a la bandera canadiense sosteniendo la solución de artificio de identidades moribundas? Por otro lado, FABLE, un impasto de azul con violeta y otros materiales, aún cuando nocturnal en su visión, es más un cuenta cuentos. Es una realidad continuamente golpeada por los ciclones o por la guerra. La vida es cambiada por lo mágico, el hechizo, o la reconstrucción social de la realidad. ARLEQUIN, con sus colores danzantes voladores descubre figuras a la imaginación.


Otras pinturas son más serenas. Los títulos no siempre son de gran importancia en el arte de Alberto Cerritos. En otras palabras la referencialidad es perdida dejando libre al observador para interpretar y participar. Algunas veces sín embargo inscripciones puntean las telas como para exponer las dimensiones varias de la realidad étnica canadiense. EL POETA incorpora un poema en lengua Farsi. La necesidad para permanecer está m´ås marcada por la inscripción específica del poema. Las figuras, la musa, la inspiración junto con el poeta son una gozoso himno de amor, de creatividad y de libertad. Escribir adquiere resonancia visual, el efecto emblemático de las palabras adentro de la pintura puede ser apoyo o rechazo, como en un rebote de acceso a la lectura. ESTELA PACKAGE1 es como un recuerdo: diversidad y alguna confusión son parte del mosaico canadiense. Aún cuando las preocupaciones existenciales implícitas en las pinturas son a menudo serias, su representación es carnavalesca. SAINT SUPERMAN es una parodia elocuente de la cultura consumista contemporánea. Supermán, con un halo de santo sostiene una bola de cristal globo en sus manos. La analogía con la tira cómica de la sociedad moderna muestra otros caracteres ilustrados: scrooge, mcduck, mickey mouse, mafalda la chismosa.

Un agrandado cuerpo de mujer ocupa diagonalmente el centro de la tela. Su valor erótico y sugerido por los colores y por el hecho de que sus pechos desnudos son parte de la cabeza del mickey mouse y del ojo de mafalda. Capa por capa, historias y caracteres son superpuestos en un verdadero banquete para la imaginación.


La obra de Alberto Cerritos se yergue para recordar al público Canadiense que igual que la vida de los famosos escritores latino americanos, los artistas también imponen con brillo y solidez, la vitalidad de su visión. Nunca la colonización ní las vaguedades del cambiante clima poíitico parecen haber manchado su creatividad. Parece ser que en superar todas esas influencias externas ellos actualmente han elevado su independencia y creatividad.


Esta exhibición fue hecha posible gracias a la visión y juicio artístico del Dr. Edward Gibson, director de la galería y al apoyo visionario de Janet Menzies, archivadora de la Colección y también a la asistencia del grupo de trabajo de los estudiantes.



Dr. Grazia Merler

Directora Ejecutiva del Comité de  Exhibiciones

Galería Simon Fraser,  Julio 1995.





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alberto cerritos: el complex arte, el arte electronico y la especulacion expresionista


Alberto Cerritos, es un creador universal, residente en la Columbia Británica, Vancouver, Canadá, de nacionalidad canadiense pero salvadoreño de nacimiento. Su creación multidisplinar comprende una extensa producción pictórica, escultórica, obra digital y murales. Teórico, poeta y escritor, autor de la teoría del Complex Arte, en la que dialoga sobre los vericuetos y laberintos existentes en la dinámica plástica de hoy, define que la pasión es la razón de la mente de hoy quien transforma la frialdad de la tecnología en marasmo febril vibracional.. Analiza las responsabilidades del arte en la era tecnológica, en la que se cuestionan los valores tradicionales pero no desaparecen sino que se enriquecen. En este sentido la actual era combina la síntesis analítica con la expresión libre de fusiones plásticas de diversa procedencia. 


Su obra, en líneas generales, posee un marcado carácter expresionista especulativo, dado que busca la simbiosis entre elementos tecnológicos y aportaciones cibernéticas, con el mundo icónico primitivo, de culturas ancestrales indígenas. De ahí que su arte, posea un cierto mundialismo buscado expresamente, en el sentido de apoyar con fuerza la pintura emblemática de los signos, nutrida de colores contrastados, combinada con series digitales intensas, llenas de alusiones y metáforas como las series Narciso, Venus, Corazón o Cibernética en su extensa producción de arte digital formada por más de cuarenta series y en sus obras pictóricas sobre tela. 


Es un creador de hoy que no renuncia al pasado, que se adentra en los vericuetos de lo primitivo para resaltar las contradicciones de la creación plástica actual. Estamos viviendo una auténtica fusión de conceptos, pero, a la vez, constatamos una cierta fuga de la realidad histórica, con lo que se crea una especie de limbo en el que, se vuelven a repetir conceptos que en la vanguardia histórica ya se habían tratado con notable profundidad. De ahí que en su Complex Arte Alberto Cerritos prefiera decantarse por la dialéctica de lo social, incorporando a su visión cósmica, su intención mundialista, su preponderancia hacia el color, entendiéndolo de forma visceral, apasionada, conformada por millones de instantes e intenciones. Hay amor, calidez, sensibilidad y delicadeza concentradas, a pesar de su expresionismo metafórico tecnológico combinado con los destellos de humanismo lumínico. Prevalecen una pléyade intensa de formas contrastadas, unas dentro de otras, buscando expresarse dentro de la notable variedad de laberintos que conforman la existencia plástica. 


Entiende que no hay un solo camino, sino, varios, que se cruzan, buscan e incluso se gustan en el marasmo vibracional de intenciones. No pretende encontrar el término medio, el justo camino, la fuerza de la determinación para hallar la ecuación exacta, sino que gusta de expandir su arte, contrastando formas, buscando momentos plásticos sublimes, intensos, que alcanzan el climax en más de una ocasión. Se trata de exhibir todo el poder visceral frente a la vertiente más analítica, a partir de constatar las posibilidades expresivas del ciber arte y la pintura, pero también en su escultura y murales, adentrándose en el corazón de lo plástico, para hallar la pulsión humana, aquella que nos dice que lo perfecto es utopía, pero no la razón de la mente intelectual. Somos unos desconocidos para nosotros mismos. Vivimos en plena huída hacia delante, cuando, la realidad del corazón es la que realmente nos guía en combinación con la otra realidad espiritual. Sin los ideales y las energías no existiría la tierra y sus propósitos. Sin la maquinaria, la dialéctica del BIT, el sonido de las instalaciones, la fuerza de la nueva pintura del expresionismo eléctrico, no existiría el alma del artista. Y eso lo sabe muy bien el creador canadiense.

Joan Lluís Montané

De la Asociación Internacional de Críticos de Arte 

2006, Madrid, España​​

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